martes, 27 de diciembre de 2011

Una Lupita muy especial

En la mayoría de las familias mexicanas siempre tenemos una tía, una hermana, una abuela o abuelo, una madre o una hija llamada Lupita. Y en mi familia no es la excepción; tengo una hermana y una madre con ese nombre pero esta vez quiero contarles sobre mi madre.
Es la segunda hija de 6 hermanos, de una familia humilde, con padre albañil y madre dedicada al hogar haciendo mil cosas para ayudar a sacar la familia adelante.
Mi mamá era una niña muy inquieta que pronto tomo el liderato de su familia, hablaba hasta por los codos, con un alto sentido de responsabilidad y radical en su formaciòn de valores; siempre ayudo en casa hasta donde le permitían y ayudo al cuidado de sus hermanos menores, ella adoraba ir a la escuela, aunque no era una niña genio, si era muy dedicada en sus estudios, le encantaba aprender, lo cual la llevó tanto a clases de corte y confección como de repostería; se maravillaba al conocer cosas nuevas, tiene un gran espíritu aventurero y es muy amiguera.
Al no poder seguir estudiando salio a la vida laboral, trabajando ella y su hermana mayor en una fabrica donde hacían ropa para bebé.
Ahí conoció al hombre que le cambio la vida en muchos aspectos, mi papá un obrero con gran inteligencia pero poca educación; después de un año de novios se casaron, desatando el enojo de la abuela.
Tuvieron 4 hijos, un niño y tres niñas, la mayoría de las veces mis papas peleaban por que no se ponían deacuerdo en nada excepto en lo que querían para sus hijos y así mi mamá ayudo trabajando en un taller de costura que pusieron en nuestra propia casa para ayudar con los gastos de la escuela y poder pagar nuestra casa.
Pero la estabilidad familiar y la abundancia no duraron mucho tiempo, con el temblor del 85 empezó la crisis económica y al enterarse mi ma que mi papa llevaba una doble vida, entramos también en crisis familiar, la cual duró 2 años hasta que se pudo armar de valor y tomar las riendas de la casa y la familia. Así mi papá salio de la casa y nuestras vidas.
Con 4 hijos aún estudiando mi ma tuvo que salir a trabajar y aprender de la calle y los trabajos siempre con un gran sentido maternal que nos llevo en algún tiempo estar invadidas por gente extraña  con problemas la cual mi ma siempre quería ayudar. Llegó a tener hasta 5 trabajos al mismo tiempo para poder cubrir los gastos de la casa.
Hasta que le llegó la menopausia y ya no se pudo levantar, así que nos tocaba entrar al quite  y mi hermano por supuesto al ser el mayor llevaba la parte mas pesada.
Aunque mi ma se recupero y regreso a la vida laboral nunca volvió a ser la misma.
Siempre complice de lo que querían hacer sus hijos nos ayudo  de una manera indirecta a unos y mas directa a otros a ser complices de nuestros sueños.
A mi en particular me ha ayudado a ir formando poco a poco una guardería donde comparte su experiencia con los papas de los peques y desborda su amor inmenso con los pequeños.
Ahora es una abuela consentidora y amorosa, una madre que escucha y aconseja, una hermana que comprende y acompaña, una amiga que apoya y disfruta, que sueña con seguir conociendo el mundo. Esa es nuestra Lupita que nos ama, protege y ayuda.
TE QUIERO MAMA TUTITITA..........(LUPITA)......

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