Uno siempre sueña con encontrar su media naranja, su príncipe azul, su persona ideal que llene todas sus espectativas y cumpla con sus ideales de una pareja perfecta.
Lo cierto es que la realidad viene siendo muy distinta. Amamos mucho y por tanto idealizamos mucho; construir relaciones duraderas no es algo fácil tiene que tener todos los ingredientes, como en una receta de cocina y también varía dependiendo el tipo de personas y las nececidades que tenga cada una, por tal motivo la misma receta no funciona para todos, cada pareja va creando su platillo especial. Pero en ese proceso de creación puede haber muchos tropiezos y muchos errores pero es parte de llegar al ideal.Al platillo perfecto....
El aprender amar tanto lo que nos gusta, como lo que nos disgusta de nuestra pareja, no es tarea fácil.
El saber ceder y negociar en ciertas cituaciones, te da cimientos en una relación, siempre y cuando sea de las dos partes. Por que cuando no es así se vuelve complicado y se pierde el equilibrio y es muy difícil mantenerlo.
Al conocer algunas historias me he dado cuenta de lo complicado que es; pero al mismo tiempo de lo hermoso que es contar con alguien que este a tu lado aunque sea para gritarle por teléfono y colgarle,
o que hagan todo juntos, o disfrutar lo que mas te gusta, que comparta tus sueños,o que quiera corregir todo el tiempo tus defectos, que no sea lo que los demás esperaban pero que te haga feliz, que te ponga de cabeza, o te haga desesperar, o te de el valor de lograr lo imposible...
Pero al final del día dar gracias por que están ahí durmiendo a nuestro lado con sus imperfecciones,por que los amamos de manera imperfecta, pero los amamos, los amamos, los amamos......Por que estan ahí siempre que los necesitamos, de alguna manera esta ahí......
No hay comentarios:
Publicar un comentario